De izquierdas?

martes, 1 de marzo de 2011


Según palabras de Quiteria Quirao  en plena campaña electoral de cara a las municipales del 22 de mayo ha sentado cátedra, según el titular “ICV dice que Mataró continua siendo de izquierdas” . Por una vez, alguna más sin duda, estoy completamente de acuerdo con lo que dice, aunque la cuestión principal no es en que espectro político esta la población de la ciudad, la cuestión es si ICV es de izquierdas.

La primera vez que vi en persona al anterior cabeza de lista, Graupera, fue cuando vino a vendernos su “producto”  a  la entidad a la cual pertenecía en aquello momentos, la primera o segunda palabra que utilizo para centrarnos en su posicionamiento político era algo así como nosotros somos los herederos del PSUC, olvidando que efectivamente algunos se pasaron a iniciativa pero otros se fueron a una organización política que todavía existe el  PCC. el estribillo de la misma canción cuando se acercan elecciones.

Ser de izquierdas para unos es una cosa y para otros, otra diferente. Los socialistas se dicen de izquierdas, los llamados ecosocialistas también, de  los comunistas que decir  y otros muchos que así se autodefinen  aunque  hay actos que desde luego no son de gente de izquierdas. Conciliar la vida sindical con la vida política hace que ocurran situaciones graciosas, no creo exista ningún sindicalista que apueste por el tipo de contratos basura  que ofrece el Corte Ingles pero sorpresas da la vida, aquí en casa ICV apuesta por el Corte Ingles siendo su cabeza de lista sindicalista antes que politico, cosas de la vida como diría alguien que conozco, el fin justifica los medios. Más vale unos puestos de trabajo aunque no lleguen sus trabajadores a cobrar ni 1000 euros que estar en el paro, hasta ese punto llego la lucha de clases en estos tiempos tan modernos, en otros puntos de la geografía CC.OO no opina lo mismo

"Además, advierte de que el nuevo acuerdo "contiene una desregularización de la jornada, que hace imposible la conciliación vida laboral y familiar; disminuye la cobertura en caso de enfermedad; elimina los compromisos de garantía de empleo fijo, estable y con derechos contemplados en el anterior convenio; e instaura una política salarial que pone en peligro el mantenimiento del poder adquisitivo"..  dicen

Tampoco creo sea de izquierdas permitir que sus socios coloquen a dedo exregidores con el beneplácito de ICV y sobre todo no creo sea de izquierdas  incumplir un convenio colectivo, estar en el poder acarrea ser  patronal en algunos casos, que posteriormente un juez en primera instancia  falla del  lado de los trabajadores dándoles la razón en sentencia.  Cuando uno tiene trabajadores a sueldo es difícil ser de izquierdas, que se lo pregunten a unos cuantos que tenían un jefe que se autodefinía, aun lo hace,  más que de izquierdas dejándolos  en la calle y sin cobrar, o que se lo pregunten a una trabajadora de una entidad que fue maltratada en su despido por sindicalistas que se rasgan las vestiduras diariamente por los abusos de la patronal en su trabajo y del Ayuntamiento en las oficinas del cementerio de elefantes.

Es difícil ser de izquierdas según en qué parte de la mesa estas, lo reconozco,  por eso la pregunta seria, es Iniciativa de izquierdas los 4 años de mandato o solo 4 meses antes de las elecciones para marcar perfil "izquierdoso", luego si es necesaria para sumar otra vez a la rueda, ésa es la pregunta a la que no me atrevo a poner respuesta aunque todos sabemos cual es.

3 comentarios:

ILDEFONSO MARMOL dijo...

Hace mucho tiempo que los partidos han perdido la "denominación de orígen". Hacen gala y uso de unos anagramas que ya no les pertenecen.
¿Donde han quedado la ética y los principios, de aquellos partidos, de los que se dicen proceder?
Recuerdo una reunión sobre las antenas móviles, responsabilidad en aquella época de la misma persona a la que haces referencia, en la que nos contestó, que ella no podía denegar una petición de las compañías de móviles, porque podía ir a la cárcel.
¿Como puede esta misma persona sentirse heredera de personas como "El Guti", que venía a darnos conferencias a escondidas, jugándose el acabar en la cárcel si los descubrían?
¡Por favor un poco de dignidad!
Han perdido el rumbo, con sus actuaciones han conseguido que los ciudadanos no sepan ya distinguir donde está la derecha o la izquierda, es tan poco lo que los diferencia.
Está claro que estos partidos ya no nos sirven, no hay que votarlos, a ninguno.
Las asociaciones de vecinos se han de convertir en partidos políticos, que por medio de la participación verdadera, mediante asambles y reuniones puedan hacer valer sus opiniones y priorizar las actuaciones económicas según la propia opinión ciudadana de cada barrio, de lo contrario siempre estaremos en manos de estos políticos, que más que eso son simplemente funcionarios de primer escalón, que firman todo lo que les ponen delante y que actúan en su propio beneficio a costa de unas mayorías a las que ni siquiera nos escuchan.
La democracia que nos venden es solo "represen-tativa", le damos el voto cada cuatro años, y hacen con él lo que les vienen en gana.
Queremos una democracia real y esa no puede ser otra que la democracia participativa auténtica: La de ahora, "vosotros opináis y nosotros decidimos", ya hemos visto que para lo único que sirve, es para colocar amigos y parientes en el "pesebre"

Julián Hernández Tello dijo...

Marmol,

Estoy completamente de acuerdo contigo en todo menos en una cosa. La solución no esta en las Asociaciones de Vecinos porque muchas de ellas tienen los mismos "vicios" que el poder, incluyendo a la que aglutina a todas que no solo tiene los mismos vicios incluso alguno más, sin olvidarnos que precisamente muchos de ellos salieron de estas por lo que si los echamos volverán a coparlas y estaremos en las mismas

ILDEFONSO MARMOL dijo...

No hablo de las que existen, en su mayoría son parte del mismo sitema y se aprovechan de las mismas subenciones. Hablo de verdaderas asociaciones de vecinos, formadas fuera del paraguas protector de esta casta que se ha instalada en todo tipo de asociaciones, cuyos directivos son incapaces de buscarse la vida por otros derroteros.

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