Los pies negros son los auténticos, los más chachi pirulis, como decía el otro día, pero hay otra tribu repartida por la ciudad con incluso su propio patio particular donde, cómo no, también llueve. Nada anormal si tenemos en cuenta que cuando llueve la hace para todo el mundo en el radio de acción de las nubes que descargan agua.
Pues no, en su patio se moja quien ellos quieren, se cubre de agua la parte del patio que como no, también ellos quieren y no precisamente por el desnivel hacia el desagüe , e incluso el agua que cae, de la lluvia en su patio, tiene que estar a una temperatura que ellos deciden y si debe ser de color rojizo, lo que se llama lluvia de barro, o transparente.
Estos, los dueños del patio, son igual de “peligrosos” que los pies negros ya que también deciden quien tiene que participar al ser ellos los que se “autoproponen” como los “participadores” por excelencia desde tiempos inmemorables.
Yo no pertenezco a ninguna de esas dos castas pero lo siento mucho, opinare de lo que me dé la gana y sobre todo lo hare donde me dé la gana. El que se extrañe que piense lo que quiera pero que diga la verdad a sus colegas del patio. El que se apropia de palabras como participación es tan facha como los que ellos mismos autodefinen como fachas. Lo que debería hacer alguno de estos es pasarse al bando de los ex –, verán que incluso la institución puede funcionar sin ellos.
No sé si conocen que los cargos no son vitalicios por mucho que se camuflen con hoy vice, hoy secre, hoy tesorero, hoy vocal, hoy me quedo, otra vez, porque no hay relevo, hoy no se que, hoy no se cuanto. Menos mal que su puesto no tiene retribución dinerada, otra cosa es la retribución social, si lo fuera no se diferenciarían mucho de los otros, de los profesionales con sueldo. Lo único que les diferencia es que unos cobran y ellos no, lo demás es muy parecido, aparecieron más o menos al mismo tiempo, llevan más o menos el mismo tiempo, a la hora de gestionar lo hacen igual de mal, cambian de cartera pero no de patio y tal y tal.
Pues no, en su patio se moja quien ellos quieren, se cubre de agua la parte del patio que como no, también ellos quieren y no precisamente por el desnivel hacia el desagüe , e incluso el agua que cae, de la lluvia en su patio, tiene que estar a una temperatura que ellos deciden y si debe ser de color rojizo, lo que se llama lluvia de barro, o transparente.
Estos, los dueños del patio, son igual de “peligrosos” que los pies negros ya que también deciden quien tiene que participar al ser ellos los que se “autoproponen” como los “participadores” por excelencia desde tiempos inmemorables.
Yo no pertenezco a ninguna de esas dos castas pero lo siento mucho, opinare de lo que me dé la gana y sobre todo lo hare donde me dé la gana. El que se extrañe que piense lo que quiera pero que diga la verdad a sus colegas del patio. El que se apropia de palabras como participación es tan facha como los que ellos mismos autodefinen como fachas. Lo que debería hacer alguno de estos es pasarse al bando de los ex –, verán que incluso la institución puede funcionar sin ellos.
No sé si conocen que los cargos no son vitalicios por mucho que se camuflen con hoy vice, hoy secre, hoy tesorero, hoy vocal, hoy me quedo, otra vez, porque no hay relevo, hoy no se que, hoy no se cuanto. Menos mal que su puesto no tiene retribución dinerada, otra cosa es la retribución social, si lo fuera no se diferenciarían mucho de los otros, de los profesionales con sueldo. Lo único que les diferencia es que unos cobran y ellos no, lo demás es muy parecido, aparecieron más o menos al mismo tiempo, llevan más o menos el mismo tiempo, a la hora de gestionar lo hacen igual de mal, cambian de cartera pero no de patio y tal y tal.
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