Primarias

Las primarias son para gente valiente al tener  que dar la cara, ganarte el voto,  ante las bases y no entre los cuatro colegas que suelen reunirse alrededor tuyo para adularte entre otras cosas porque como esta “montao el negocio” si alguno  de los palmeros no se ríe de tus chistes  pasas rápidamente de amigo ,a  enemigo sin cargo, ni sueldo. Mucho  más, si cabe  si el poder, también llamado aparato, no te quiere, no le gustas o simplemente te tiene miedo y te arrincona utilizando el poder para asustar a los que seguramente les gustaría sentase contigo, el valiente,  a tomar café al tener miedo del inquisidor por si te ve.

Lo que ha pasado estas últimas semanas en Madrid, con Tomas Gomez,   es un claro ejemplo de un político valiente y sobre todo de cómo es la política en su estado puro. No le conozco pero debe serlo, valiente,  al plantear un pulso que si hubiese perdido le hubiese llevado a tener que recoger los objetos personales de su despacho e irse a su casa para contarles a sus futuros nietos que una vez por ser valiente se fue a casa al no querer que le dolieran  las manos de dar  palmas constantemente   . No hay que saber mucho de leer entrelineas para saber que insinuaba un ministro, del interior para más señas, cuando dijo que decir NO, tendría sus consecuencias.

Lo que pasa en muchas agrupaciones de casi todos los partidos políticos es que ronda el miedo cada cuatro años y el peloteo durante los anteriores cuatro y los cuatros posteriores. Si eres valiente tienes pocas posibilidades de salir para eso que dicen de transforma la sociedad.Pinocho,  sin saberlo,  ha sido el mejor hooligan  para Tomas Gomez.  Los ciudadanos en general, al margen de los afiliados del PSOE,  ha pasado de no saber quién era, a conocer una persona que sabe decir no en política, a su jefe, haciéndole la mejor  campaña electoral  sin coste alguno. Me da la sensación que este tipo si no gana faltara poco. Pinocho ha cometido muchos errores pero si, este, llega a la Plaza del Sol debería salir al balcón de Ferraz para decir que se vuelve a León inmediatamente.

A ver si alguien sigue el ejemplo  aquí, en nuestra ciudad, que alguien se plantea que es posible el cambio, si nadie lo es, valiente,  puede suceder que esta sea la última legislatura que el PSC tiene mando en plaza. Los valientes desde luego no deben ser los del clan de la castaña al ser estos  los mismos caballos con diferentes monturas.

 Cada año hay más y más marineros que abandonan el barco sin que  nadie se atreva  a comandar el motín y eso que aquí no hay pena de horca para los sublevados. Eso sí, si  sale mal no morirán físicamente pero  a nivel político/a que se den por muertos aunque no cambiara nada al estar ya muertos hace tiempo. Lo primero que deberían hacer es soltar lastre desmarcándose del poder, muchos lo han hechos hasta el momento pero lo único que han conseguido es dejar el partido en las mismas manos, en perdonas  con las mismos tic que ellos tantos detestan.